Creo que todos estaremos de acuerdo en declarar a la inflación como uno de los mayores quebraderos de cabeza de los bancos centrales actualmente. Pero no es el único. El crecimiento todavía no es, en muchas regiones, todo lo fuerte que debería para que un movimiento de política monetaria encaminado a contener los precios no tenga un efecto pernicioso en la actividad económica. Así, ayer sorprendía el Banco de Inglaterra al dejar nuevamente sin movimiento sus tipos de interés cuando el consenso del mercado esperaba que se incrementaran. En consecuencia, los bonos, sobre todo los de más corto plazo, reaccionaban con alza de precios para incluir en su valoración esta decisión del regulador británico.
El contagio hacia el resto de referencias de deuda fue mayoritariamente generalizado, impulsando también a la renta variable, sobre todo a las grandes compañías tecnológicas. De hecho, tanto S&P 500 como Nasdaq Composite marcaban nuevos máximos, con este último, además, encadenando su mayor racha de sesiones positivas consecutivas en los últimos dieciséis meses. Importante será ver si las publicaciones macroeconómicas de hoy, relativas al empleo americano, apoyan esta tendencia de mayor relajación o, por el contrario, echan más leña al fuego de la inflación.
En la esfera política, hoy mismo se podrían votar los nuevos paquetes de estímulo prometidos por Joe Biden. El primero, el de infraestructuras, parece tenerlo más fácil por llevar semanas siendo negociado por ambos partidos, pero el segundo… El segundo, conocido como el social-climático, me parece, en parte, un movimiento de marketing. Sí es cierto que sabíamos que el presidente americano quería ciertas reformas sociales, pero lo de climático suena más a un adorno que coincide con la celebración de la Cumbre del Clima en Glasgow. ¿Coincidencia?
Finalmente, cabe mencionar que los problemas no paran de crecer en el sector inmobiliario chino. Por si no fuese suficiente con Evergrande, hoy se suspendía de cotización al grupo Kaisa tras el impago de un cupón por parte de una de sus filiales. Y la propia Evergrande deberá hacer frente a otro compromiso mañana, de lo cual se duda. Vienen (más) curvas para Xi Jinping.
Buen fin de semana.
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