La semana pasada se saldaba con pérdidas en las bolsas y subidas en los mercados de bonos, de igual manera que ha comenzado esta. El impacto del coronavirus empieza a dejarse notar en las compañías, ahora llega a Italia y el mercado no podrá mirar hacia otro lado.
La noticia positiva de la semana vino por la parte de renta fija. En la zona euro, el segmento de deuda pública volvía a atraer dinero y acumula ya una ganancia superior al 2,5% en lo que llevamos de año. Los segmentos de bonos corporativos de calidad y high yield también se beneficiaban de la apuesta de los gestores por estos activos. Los europeos también se veían favorecidos por la apreciación del dólar, mientras el oro mantiene sus números verdes.
Este fin de semana, toda la atención se ha centrado en la rápida expansión del coronavirus por Italia. La alarma se extiende por todo el país mientras las autoridades intentan crear un cordón sanitario en una de las áreas más pobladas y de mayor importancia económica transalpina, dejando incluso a Venecia sin los últimos días de celebración de su famoso carnaval.
En el terreno macroeconómico, hay que destacar que el viernes por la tarde la publicación de los PMI preliminares de febrero en EE.UU. decepcionaron, al contrario de lo que sucedía con los europeos. Por otro lado, tenemos que recalcar especialmente la contracción del componente de servicios que registraba su peor lectura desde 2013. Esta semana la publicación en EE.UU. de la confianza consumidora del Conference Board de febrero, que seguiría en niveles cercanos a máximos históricos, y la confirmación del PIB de Alemania y EE.UU. serán las principales referencias. Pero estos datos podrían no tener ninguna influencia en unos inversores completamente focalizados en la evolución de la crisis sanitaria.
Buena semana.