Estoy teniendo un déjà vu que me está llevando de vuelta a 2015.
Al menos si no por el fondo, por las formas. China vuelve a regalarnos un agosto convulso. O así es como parece que se presenta tras la caída del yuan por encima de los 7 dólares americanos. Este nivel, es considerado psicológico por muchos inversores y nunca se había superado desde que el par USD/CNY es negociado en mercados internacionales, allá por el 2010.
Pero comencemos por el principio. Representantes chinos y norteamericanos estuvieron negociando la semana pasada en Shanghái. Al término de la cita, no se habían realizado grandes avances, pero pensábamos que se citarían para continuar las conversaciones en suelo estadounidense. Sin embargo, llegó Donald Trump y “rompió la baraja” al imponer, vía tweet, aranceles a 300.000 millones de importaciones chinas, a lo que el gobierno asiático prometió represalias. Y aquí tenemos a las compañías públicas chinas dejando de comprar productos agrícolas de su competidor y a la divisa devaluada para compensar esos aranceles, haciendo más barato a los americanos comprar bienes en yuanes.
Evidentemente y como se podía esperar, los mercados de todo el mundo reaccionaban a la baja ante este (puede que definitivo) distanciamiento entre las dos potencias mundiales. Las que actuaban, esta vez sí, como refugio eran las referencias de deuda de los principales países desarrollados, que entendemos están descontando ya que estas acciones van a perjudicar el estado de la economía, y que esto supondrá más medidas de estímulo. En la pantalla podemos ver ya al bund alemán a 10 años en el -0,52%, el treasury americano en el 1,76% o nuestro bono del Estado en el 0,22%. Mención a parte merece el 30 años germano, en terreno negativo por primera vez en la historia.
Esta semana algunos miembros del Comité de Mercado Abierto de la Reserva Federal tienen programadas comparecencias públicas. Veremos si nos dan alguna pista de los cambios que este nuevo entorno puede provocar en su escenario central. ¿Más droga para los dopados mercados?
Buena semana.