El entorno actual es un polvorín de pequeñas cosas

Un día de tranquilidad de vez en cuando tampoco está de más.

Ayer fue uno de esos días donde pasaron cosas, pero tampoco muchas, por lo que los inversores aprovecharon para realizar beneficios en vista de lo que pueda pasar. Pensé que después de las elecciones tendríamos un final de año tranquilo, pero la situación empieza a ponerse más interesante de lo esperado, con pequeños focos aquí y allá.

Si comenzamos en el canal de la mancha, como hemos dicho estos días, parece que existe un principio de acuerdo entre el Reino Unido y la Unión, pero la COVID-19 ha hecho su aparición estrella en las negociaciones al verse obligado Barnier, negociador por parte de Bruselas, a guardar cuarentena por contacto con un positivo. No obstante, en los próximos días podríamos tener noticias a este respecto, evitando un brexit duro. Desde luego que será un alivio para todas las empresas que importan al —o exportan desde el— Reino Unido, pero no se hacen una idea de las ganas que tenemos los analistas de pasar página. En junio de 2016 los británicos votaron a favor de desligarse de la Unión Europea, y en ese mismo año ganó Donald Trump las elecciones que le hicieron presidente. El mandato del americano está a puntito de finalizar y nosotros aún podemos entrar en Londres con el DNI.

Pero ya que mencionamos al presidentísimo, aún no ha comenzado a hacer las cajas de la mudanza de la Casa Blanca. Dice que ya, si eso, se las haga el servicio secreto en enero cuando le tengan que sacar en volandas del ala oeste. Esto complica sobremanera la organización y traspaso de poderes. Parece que esta administración pretende dar guerra hasta el final, pues ayer, Steve Mnuchin, secretario del Tesoro, anunció en contra del consejo de la Reserva Federal que para finales de año cerraría alguno de los programas de estímulos que el Gobierno puso en marcha con la crisis sanitaria. Y mientras, el líder de la minoría (demócrata) en el Senado dice que se han acercado posiciones con los republicanos para lanzar un nuevo plan. Yo ya no sé a quién hacer caso…

Finalmente, veremos si el Eurogrupo consigue desbloquear los presupuestos comunitarios. Hungría y Polonia los han vetado por ligar la percepción de fondos al cumplimiento del estado de derecho. Parece mentira que en el año 2020 siga habiendo países que no se comprometan con el respeto a la democracia y los derechos y libertades individuales. Y lo que es peor, que sean Estados miembros.

Lo que yo les decía: el entorno actual es un polvorín de pequeñas cositas. Y eso que casi no he mencionado el virus…

Buen fin de semana.