Parece que con el verano, además de los días de vacaciones, llegan las buenas noticias.
Se han dado favorables resultados empresariales y datos macroeconómicos, subidas suaves en las bolsas e incluso palabras amables en un plano político centrado en las negociaciones de un incierto brexit.
Así, EEUU continua viviendo su particular idilio económico-financiero. Con sus índices cerrando una semana más en positivo y de nuevo en máximos históricos, 421 compañías del S&P 500 han reportado ya sus resultados y están dejando pocos argumentos a los más pesimistas del mercado. Crecimientos importantes tanto en ventas como en beneficios y en donde únicamente el sector utilities decrece en esta última variable.
El tono macroeconómico es también, sin lugar a dudas, favorable. Así, el viernes conocíamos el informe de empleo que reflejaba una creación de 209.000 puestos de trabajo no agrícolas, muy por encima de los 183.000 estimados y que llevaba a la tasa de desempleo al 4,3%. Reseñable también el hecho de que el salario por hora aumentaba un 2,5% interanual.
En Europa teníamos pocas referencias en la sesión del viernes. La producción industrial alemana era la más importante y reflejaba una caída del 1,1%, registro que se considera temporal y que contrasta con un buen dato de pedidos industriales en el mismo país.
Esperemos que los días venideros vengan cargados del mismo buen tono. Posiblemente sea el mercado de divisas el que más sustos nos pueda dar, con la libra en niveles mínimos desde el brexit y el dólar cotizando a 1,17 en su cruce contra la divisa comunitaria.
Buen día.
Pablo Nortes Planas
Dirección de Inversiones
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