Después de superar las reuniones de los bancos centrales de junio sin sorpresas, la volatilidad ha regresado.
Empecemos con los resultados:
Durante la semana pasada regresamos a terreno negativo en nuestro resultado anual. Tenemos que seguir manteniendo posiciones prudentes a pesar de que nuestra visión macro se ve corroborada por buenos datos en Europa y Estados Unidos. La incertidumbre generada en diversos puntos del planeta a nivel político, disputas proteccionistas y tensiones en mercados emergentes, ha superado los buenos datos adelantados que pueden llevarnos a crecimientos económicos por encima de las previsiones en el segundo trimestre del año.
No hemos realizado operaciones destacables durante la semana, estamos estudiando el incremento de exposición a bolsas a través de la reducción de coberturas y seguimos esperando una normalización de los tipos de interés a largo plazo en los mercados europeos. Mantenemos nuestra protección frente a crisis periféricas vía venta de bonos de gobiernos.
Hasta la fecha se trata de un año de preservación de capital y, por tanto, esperaremos a la confirmación de las cifras macro y la presentación de resultados del segundo trimestre para realizar cambios significativos en la cartera.
Recuerden: si las letras del Tesoro ofrecen rentabilidades negativas, no hay retorno sin riesgo y, como siempre, “Tengan cuidado ahí fuera”.