Semana sin grandes cambios, con volatilidades a la baja y esperando el inicio de la temporada de resultados en la que, probablemente, el mayor interés se pondrá en determinar la repercusión que pudieran tener las actuales tensiones comerciales. Empezaremos por los resultados:
La mejora de los mercados de renta variable durante los últimos días y el menor tensionamiento de los spreads en crédito han permitido mejorar la rentabilidad anual hasta situarla en el -0,73%, aportando 0,57% los activos de renta variable, -1,10% los de renta fija y el resto, -0,20%, la posición en oro.
En nuestro anterior comentario hacíamos alusión a la intención de ser exigentes con los precios a los que incrementar posición en renta variable. Los múltiplos actuales son atractivos, aunque queremos ser cautos dado el entorno de incertidumbre generado por los cambios que previsiblemente tengan lugar en las relaciones comerciales. Tras los primeros movimientos de Donald Trump en relación a Europa, la semana pasada comprobábamos cómo el embajador de Estados Unidos en Alemania, en su reunión con los fabricantes de autos, intentaba suavizar las tensiones abriendo la puerta a una negociación sobre la política arancelaria aplicada al sector por ambas economías. Pensamos que esto no es más que una muestra de que una de las fuentes de inquietud de los mercados, la falta de interés negociador, se va a ir reduciendo, aunque queden otras, como el propio contenido de cualquier acuerdo comercial al que lleguen los principales bloques económicos.
Por lo anterior, cerramos la mitad de la posición de cobertura en opciones de Euro Stoxx-50, lo que hizo incrementar en apenas dos puntos la exposición a renta variable. A la vez, y con efecto neutro en el global de la cartera, vendimos el índice sectorial de autos e incrementamos la posición en algunos fabricantes individuales. La finalidad de este último giro ha sido la de reducir exposición al segmento de recambios de la cadena de valor, indudablemente más rentable que la primera, pero a unos múltiplos en máximos históricos, lo que nos ofrece ciertas dudas sobre el potencial de recorrido adicional.
A finales de esta semana comenzará la temporada de publicación de resultados en Estados Unidos, así como en Europa en breve. Creemos que los resultados seguirán siendo buenos, probablemente con cierta debilidad en el segundo tras la ralentización de la macro. No obstante, seguramente lo más interesante para el mercado será cualquier indicación cuantitativa que las compañías puedan hacer en relación a la repercusión que las tensiones comerciales tendrán en sus cuentas de resultados y en qué medida serán capaces de trasladarla al cliente final. Mientras tanto, nos mantendremos atentos.
Recuerden, si las letras del Tesoro ofrecen rentabilidades negativas, no hay retorno sin riesgo… y, como siempre, “tengan cuidado ahí fuera”.