Continúa el ruido de fondo sobre la deriva que están tomando las relaciones comerciales entre los grandes bloques económicos, pero en un entorno macroeconómico aún saludable. Empezaremos por los resultados:
Adriza Neutral ha seguido acusando durante la última semana, aunque ya en menor medida, la incertidumbre que las amenazas proteccionistas de Donald Trump están generando en el mercado. Esta vez relacionadas con restricciones comerciales con la Unión Europea, lo que ha provocado una corrección de precios en aquellos sectores más expuestos al comercio internacional, especialmente el de automóviles. Lo anterior ha hecho que la contribución de los activos de renta variable haya descendido hasta el 0,3%, cifra que ahora compensa en menor medida la aportación negativa de los activos de renta fija, afectados por los incrementos de rentabilidades exigidas y peor comportamiento de las economías emergentes. Con todo, la cartera registra un rendimiento negativo de -1,47% en el año actual.
Si bien es cierto que el escenario macroeconómico no es tan boyante como en el año anterior, especialmente para Europa, sí lo sigue siendo en Estados Unidos, que continúa exhibiendo datos que demuestran fortaleza de su economía. Los múltiplos de valoración, por ello, son bien distintos, aunque no hay que olvidar el fuerte peso que el dinámico sector tecnológico tiene en los índices americanos. Europa está experimentando un ritmo de crecimiento razonable, aunque menos fuerte que en los anteriores trimestres. El indicador de inflación general ha vuelto al 2,0%, nivel que no se alcanzaba desde algo más de cinco años, a excepción del tímido repunte de febrero del año pasado. Por ello, y aunque aún está por ver la evolución de la inflación subyacente, esperamos que el BCE siga el camino indicado en su última reunión, normalizando progresivamente su balance y subiendo tipos desde verano de 2019.
El pasado fin de semana se celebraron elecciones presidenciales en México, con un resultado sobradamente descontado por el mercado y, por tanto, sin sorpresas para nuestra cartera, que sigue estando cubierta al movimiento de la divisa mexicana. Evaluaremos de cerca los primeros discursos del nuevo presidente, Andrés Manuel López Obrador, para tomar decisiones respecto a la continuidad de nuestra cobertura.
En general, y tras una semana sin cambios significativos en la cartera, queremos mantenernos cautos y priorizar una adecuada gestión de nuestro objetivo de preservación de capital a largo plazo. Por ello, y aunque atentos a incrementar posición en renta variable —actual 35,4%—, seremos exigentes con los precios y valoraciones, con la vista puesta en los resultados del segundo trimestre que en breve empezarán a publicarse.
Recuerden: si las letras del Tesoro ofrecen rentabilidades negativas, no hay retorno sin riesgo y, como siempre, “Tengan cuidado ahí fuera”.