Y la tormenta remite

Buenos días.

Parece que la tormenta remite. Y es que una de las muchas incertidumbres del calendario político que teníamos para este año se ha saldado  —a falta del escrutinio final— con una victoria del partido conservador de David Cameron, quien podría estar, lejos de lo augurado por las encuestas, más cerca de la mayoría absoluta de lo que se esperaba. La libra y la renta variable celebran este resultado sin hacer mucho caso a aquello del referéndum secesionista.

Respecto al otro partido que se está jugando, el disputado entre Grecia y las instituciones europeas, continúa en una eterna prórroga en la que lo único que se consiguen son aumentos de la línea de financiación ELA a la banca griega y complacencia de los inversores ante el hecho de que «para la semana que viene se descarta que haya acuerdo», así sucesivamente.

Pero a la incertidumbre en el plano político a la que ya estábamos tan acostumbrados se le une la alta volatilidad que está experimentando el mercado de bonos durante las últimas sesiones. Ayer, el bono español tocaba el umbral del 2%, si bien cerraba en niveles del 1,7%, mientras el dólar se tomaba un respiro y se acercaba al nivel de 1,14 dólares por euro. Buenos datos en la zona euro e incremento del precio del petróleo parecen estar detrás de este «susto» o incremento de las expectativas de inflación, especialmente reflejado en el bund.

Del otro lado del Atlántico, los datos de peticiones de subsidios por desempleo alcanzaron las 265.000 solicitudes, que supone un aumento respecto a la semana anterior pero todavía en zona de niveles mínimos de 15 años.

​Hoy, como referencia clave, el dato de creación de empleo no agrícola del mes de abril estadounidense.

​Buen día.​​

Pablo Nortes Planas
Dirección de Inversiones