Es difícil tener pensamientos positivos cuando la OMS dice que lo peor de la pandemia está por llegar.
La pandemia se está acelerando de forma global y la situación en el continente americano cada vez preocupa más. Sin embargo, los mercados siguen a lo suyo, a pesar de que algún día los inversores recogen beneficios como ocurrió el viernes pasado en Europa.
Podríamos decir que vivimos en un mercado anestesiado por la ingente cantidad de dinero inyectada por los bancos centrales, pero ya veremos cuánto tiempo dura esta luna de miel. Dentro de unos días las empresas empezarán a dar a conocer sus cuentas del pasado trimestre y el actual optimismo puede, una de dos, o dar paso a un nuevo mercado bajista o provocar que los índices vuelvan a registrar máximos como los que vimos al inicio de año.
Mientras, debemos seguir disfrutando de las noticias sobre nuevos avances en las vacunas contra la COVID-19 y unas publicaciones macro mucho más favorables de lo que se esperaba hace poco tiempo, como los datos de confianza de los consumidores, los PMI o las cifras de desempleo de EE.UU. Hoy conoceremos el ISM de servicios de EE.UU. y las ventas minoristas de la eurozona, si no defraudan no descarten ver al Nasdaq en cotas históricas.
Buena semana.