Una semana de año y ya tenemos temas relevantes que comentar. El miércoles el mercado americano, y ayer el europeo, sufrieron caídas importantes que, de hecho, en el caso del Nasdaq Composite, fue la peor desde febrero de 2020. Pero es que el verdadero foco lo estamos teniendo en el mercado de renta fija, donde el bono americano a diez años ha visto un aumento de sus rentabilidades en todas y cada una de las sesiones de este 2022, habiendo subido ya 31 puntos básicos en estos cuatro días de mercado. Pero no solo a los plazos más largos ha afectado este movimiento, sino que los más cortos también se han visto impactados teniendo, de hecho ahora, una curva americana más plana. Y es que es lógico que estos tipos más cortos se vean impactados cuando lo que ha afectado al mercado es la posibilidad real mostrada en el acta de la última reunión de la Reserva Federal de que los tipos de interés suban antes de lo previsto, quizá tan pronto como en marzo.
Además, parece que ómicron ha dejado de ser una preocupación importante para los americanos, que ya descuentan que no va a tener un gran impacto en la economía y que ésta seguirá fortaleciéndose como así demuestra el dato de creación de empleo privado elaborado por la procesadora de nóminas ADP que conocimos ayer, con 800.000 nuevos puestos en el último mes. Esta presión del mercado laboral sobre los precios es una de las grandes razones por las que la Fed, efectivamente, se puede ver obligada a actuar sobre los tipos con mayor brevedad.
Lo que ha sucedido en los mercados de renta variable, entonces, no es más que el lógico movimiento por el que los valores más ligados al ciclo y aquellos que se ven más beneficiados por un incremento en las tasas libres de riesgo presentaban menores correcciones que aquellos denominados “de crecimiento”. En nuestra humilde opinión, si bien el efecto es lógico, no podemos dejar de verlo como un efecto de corto plazo, por lo que las oportunidades que se pueden generar en estas empresas de crecimiento, de cara a una cartera de largo plazo, pueden ser muy atractivas.
Sabemos que el mundo de la renta fija es, a menudo, complejo, sobre todo para personas menos familiarizadas con los mercados, pero debemos tratar de ayudar a todo el mundo a comprender por qué se producen los movimientos que estamos viendo. Además, estoy completamente segura de que el 2022 nos dará muchas y buenas ocasiones para seguir haciéndolo.
Buen fin de semana.