La jornada de ayer se saldó con avances de los mercados europeos mientras la Bolsa de Nueva York cerraba a la baja.
Después de una semana marcada por continuos récords, parece que los inversores aprovecharon la festividad del Día de Colón para recoger beneficios, especialmente en las compañías de menor capitalización, y mantenerse a la espera de empezar a conocer los resultados trimestrales a finales de esta semana.
Por su parte, la renta fija no presentó apenas variaciones. Y eso a pesar de que varios miembros del BCE empiezan a hablar de reducir el programa de compra de bonos a principios del próximo año, a la vez que defendían la utilidad que han tenido las políticas monetarias expansivas en la mejora de las condiciones de financiación. Pero el mercado parece anestesiado hasta que mañana se conozcan las actas de la última reunión de la Reserva Federal, que podrían dejar aún más claras las intenciones de Janet Yellen de una próxima subida de tipos de interés en diciembre.
En cuanto a las cifras económicas conocidas, Japón volvía a aumentar su superávit por cuenta corriente en agosto, al igual que Alemania, donde las exportaciones se incrementaban en un 3,1% y las importaciones en un 1,2%. La buena marcha de la economía teutona también se dejó notar en la producción industrial que alcanzó en agosto el mayor crecimiento desde julio de 2011.
Durante el día de hoy, el FMI dará a conocer sus nuevas previsiones de crecimiento para España, que en julio pasado situó en +3,1 % para 2017 y +2,4 % para 2018. Además, habrá subasta de Letras a 6 y 12 meses en la que se espera captar hasta 5.500 millones de euros. Pero lo que realmente centrara la atención de los inversores será la comparecencia de Carles Puigdemont ante el Parlamento catalán.
Buen día.
Jorge González Gómez
Dirección de Inversiones