Mejores sensaciones sabiendo que las bolsas poco a poco van recuperando el terreno perdido en las últimas semanas, gracias al apoyo de los datos económicos y las negociaciones comerciales entre las diferentes potencias comerciales.
Las noticias que venían ayer de Estados Unidos eran todas positivas. El Libro Beige de la Reserva Federal mostraba que la actividad económica ha continuado expandiéndose a un ritmo “moderado”, pese a que se ha detectado una caída en las inversiones como consecuencia de las crecientes tensiones comerciales. Solo les preocupaba la falta manifiesta de trabajadores. Además, parece que la presión de diferentes lobbies estaría empujando al gobierno a negociar con China.
En cambio, en Europa, los populistas volvían a la carga en Italia. Ahora pidiendo 10.000 millones para la renta universal, provocando un nuevo revolcón de su deuda. Por lo menos los datos de precios no defraudaban.
Por su parte, el posible impacto del huracán Florence en las infraestructuras de hidrocarburos y en el consumo energético de la costa este de Estados Unidos ha provocado una fuerte caída de los inventarios del país, llevando al petróleo a la cota de 80,50 dólares, su nivel máximo desde 2014.
De cara al día de hoy, la reunión de los bancos centrales en Inglaterra, zona euro y Turquía centrará la atención de los inversores. El último debería subir tipos si no quiere que se le desboque la inflación tras la fuerte caída de la lira. Mientras, en el caso del BCE, todo apunta a una rebaja de las previsiones de crecimiento.
Buen día.
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