La Reserva Federal ha aprovechado la primera reunión del año para reafirmar el mensaje que venía dando las últimas semanas.
Sintetizando, se puede resumir en que el banco central mantiene que se toma una pausa, que no el final, de las subidas de tipos, así como hace gala de la flexibilidad que tiene a la hora de reducir o no el balance en función de las necesidades. Y esto es lo que el mercado quiere oír, porque ha dado muestras sobradas de no querer saber nada de lo contrario, de eso de la normalización monetaria.
A lo largo de las últimas horas, tres de los verdaderos gigantes de la tecnología made in USA como son Apple, Microsoft o Facebook (aunque lo cierto es que abarcan algo más que simplemente tecnología), han presentado unos resultados variados pero positivos y que en conjunto son suficiente para que los inversores vuelvan a creer en las que se dicen acciones caras. Siendo justos, también tenemos que recordar que cualquier novedad, por no muy negativa que fuera, cotizó el año pasado, así que la facilidad para sorprender ahora al alza pierde mérito.
Nadie puede obviar que las subidas de las bolsas también se están viendo espoleadas por las tomas de contacto entre funcionarios de alto nivel de EE.UU. y China para pasar página en relación a la imposición de aranceles y cómo esto ha hecho mella en la economía global. Y menos mal que con ello se está mitigando otro escenario político como el brexit, que además está dejando en pésimo lugar a los políticos británicos. Ahora, votadas las enmiendas a las enmiendas de las enmiendas, se han encontrado con la férrea y sabida oposición de la UE que, al menos, lleva a los mercados a pensar que todo va a acabar en una prórroga del divorcio.
Desde el frente macroeconómico, los datos publicados en Europa no han sobresalido, ni para abajo ni para arriba. La confianza económica de la Comisión Europea desciende (no mucho), pero es que con todo lo que pasa en la región cómo no va a hacerlo. Bastante bien le ha salido el PIB del cuarto trimestre a Francia, pues a pesar de los chalecos amarillos hay un crecimiento de tres décimas, no sin revisión lógica a la baja. Otro que sufre un recorte de las expectativas es Alemania, que también observa un descenso muy esperado del IPC ya por debajo del punto y medio porcentual.
Buen día.
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