Buenos días.
Es necesario que tengan lugar conflictos geopolíticos para que el mercado de las materias primas despierte del letargo al que las crisis europeas y los bancos centrales las tenían condenadas. Pero las desgracias nunca vienen solas y así nos encontramos ahora con que Irak y Ucrania, que cogidas de la mano están provocando un (aún) pequeño seísmo en los mercados financieros, llevando a la macro más pura a pasar de puntillas.
Por estricto orden cronológico, el terrorismo sigue avanzando camino de Bagdad y las experiencias pasadas pero recientes en el país árabe, son lo que están evitando que de momento Occidente e Irán ¡juntos! sean incapaces de parar los pies a los yihadistas antes de que sea demasiado tarde y éstos terminen por controlar demasiadas zonas del país, lo que no sólo representaría una amenaza para la economía global por ser Irak la cuarta mayor reserva de petróleo del mundo, sino por encontrarnos con un Estado terrorista en el corazón de Oriente Próximo. A la vez, el cambio en Ucrania no se ciñe a lo político, pues Rusia le está haciendo pagar en el terreno económico al nuevo gobierno la pérdida de influencia con la exigencia de satisfacer una deuda por el suministro de gas. Sabido ya el corte del mismo a su vecino, el miedo (dejando emociones a un lado) no viene tanto por qué sucederá ahora en el día a día de los ucranianos, sino por el impacto que esto puede tener en la Europa dependiente del gas ruso, especialmente si, como ya ha sucedido en otras ocasiones, Kiev decide “redirigir” parte para si misma.
Y ya que estamos con estas, el gobierno de Argentina ha vuelto a demostrar que el pago de la deuda, en última instancia, es algo que puede quedar a la libre disposición de los gobiernos, claro que las consecuencias no son baladíes. Tras la decisión de la Corte Suprema de EEUU de, en cierto modo obligar al país del Cono Sur a pagar más de USD 1.300 MM a los tenedores de deuda, CFK se enfrenta ahora a la decisión de evitar la pérdida de confianza inversora o pasar por el aro.
En el frente macro, las noticias son generalmente positivas con la excepción de la inflación de la zona euro, que vuelve a caer al 0,5%, pero tras la batería de medidas del BCE, el miedo a la deflación parece haber arreciado. En EEUU todas las referencias de calado del día batieron previsiones y lo hicieron en terreno positivo: indicador regional de actividad de Nueva York en junio (19,3 vs 15e y 19ant), producción industrial de mayo (0,6% vs 0,5%e y -0,3%ant) y confianza de los constructores NAHB (49 vs 47e y 45ant). Además, el FMI revisó a la baja el crecimiento económico de la primera potencia para el presente año hasta el 2%, con nulo impacto en el mercado debido a que la debilidad ya conocida del primer trimestre ha sido la razón principal.
Es importante señalar que hoy da comienzo el FOMC de la Fed, es decir, la reunión sobre la política monetaria de EEUU que tiene lugar cada seis semanas, todavía con el QE y el tapering como elementos principales.
Buen día.
Amílcar Barrios Vilallonga
Dirección de Inversiones