Según Guillermo Domínguez, Delegado Territorial en Castilla y León de la Asociación Europea de Asesores Financieros, el mundo del trading, por lo general, está enfocado a brókers profesionales dedicados en exclusiva a esta tarea. Aunque existen una serie de cursos enfocados para inversores particulares sin conocimiento en finanzas, pero que quieren aprender herramientas que les permitan gestionar parte de su patrimonio en el corto plazo, este tipo de inversión o especulación conlleva unos riesgos importantes. La bolsa es impredecible, por lo que ganar dinero de forma constante, adivinando constantemente la dirección del mercado, es prácticamente imposible. Casi el 80% de los que invierten en estas plataformas pierden.
Por ello Guillermo Domínguez apunta que antes de decantarnos por cualquier inversión debemos estudiar bien cuáles son las necesidades personales y objetivos financieros que tenemos a corto, medio y largo plazo. Resulta fundamental contar con la ayuda de un asesor financiero cualificado para que indique cuál es la información previa que un inversor particular debe conocer antes de tomar una decisión, atendiendo a variables como el perfil de riesgo, el horizonte temporal y los objetivos vitales.
En la actualidad, el asesoramiento financiero es la única forma de minimizar las consecuencias de esta situación de crisis y volatilidad, en la que el miedo nos puede empujar a tomar decisiones de inversión erróneas. Por lo tanto, el papel del asesor financiero siempre es importante, pero ahora se convierte en una figura imprescindible por la capacidad para hacer las recomendaciones adecuadas en cada momento y atemperar esas emociones del cliente.