Nueva semana, repetidos miedos. Nada ha variado con el cambio de mes en los mercados: la incertidumbre sigue dominando el devenir de los mercados y la cautela sigue siendo el sentimiento predominante. La verdad es que pocas cosas ayudan, al menos a día de hoy, a que esto cambie.
La crisis de Evergrande sigue siendo, quizá, el mayor de los eventos que tenemos entre manos. Si bien parecía que la situación tenía visos de reconducirse, con la promotora vendiendo alguna parte de sus activos a una entidad financiera para minorar su deuda y con el Gobierno chino alentando a las empresas públicas y semipúblicas a adquirirlos, en la sesión de esta madrugada ha sido suspendida de cotización en la bolsa de Hong Kong. No solo las acciones, sino también todos los productos estructurados relacionados con Evergrande.
El otro gran foco lo encontramos en Estados Unidos: entre ponerse de acuerdo para elevar el techo de deuda que impida un cierre federal dentro de pocas semanas, y la aprobación del programa de infraestructuras que enfrenta a los propios demócratas, tenemos lío para rato. En el primer caso, cabe recordar que no es la primera vez que esto sucede y que siempre termina por solucionarse, lo cual no quita que sea un problema a corto plazo. En el segundo, el corte programático de la parte de «infraestructuras sociales» que quiere aprobar Biden no termina de convencer al ala más centrista de su propio partido. Y parece que mientras este no salga adelante tampoco lo harán las infraestructuras físicas. Políticos haciendo política.
Y mientras, las rentabilidades de la deuda ya se encuentran en niveles máximos de los últimos tres meses. La inflación parece ser más persistente de lo que queríamos pensar y los bancos centrales pueden comenzar a entrar en terreno peligroso: contener la inflación en unas economías que siguen necesitando estímulos monetarios para sostenerse.
Hoy se celebran dos reuniones a las que tendremos que prestar atención: por un lado se espera que la OPEP+ mantenga sus actuales cuotas y, por el otro, se reúne el Eurogrupo, el cual podría darnos nueva información sobre el estado real de la economía comunitaria y las previsiones acerca su devenir.
Buena semana.