El euro se dispara frente al dólar

Una vez hemos dejado atrás las primeras reuniones de los bancos centrales en el año, iniciamos una semana en la que el conflicto entre Rusia y Ucrania, con su obvia importancia geopolítica, así como los efectos que está teniendo en la cotización de las materias primas energéticas, centrará la atención de los inversores. Asimismo, conoceremos un esperado dato de inflación americana, que podría tener una gran relevancia en la cotización de los bonos y por consiguiente de las empresas de crecimiento.

El viernes, los temores generados después de la encuesta de empleo ADP quedaron disipados tras publicarse los datos oficiales del mes de enero y una revisión al alza de las nóminas de diciembre. El informe ofrece una perspectiva muy positiva, sobre todo teniendo en cuenta el bajo impacto que parece que está teniendo ómicron. El primer mes del año nos deparaba la generación de 467.000 puestos de trabajo en EE.UU., el triple de lo esperado, y un aumento de los ingresos por hora del 0,7%, el mayor en 10 meses. También es destacable el incremento de la tasa de participación laboral al 62,2% respecto al 61,9% en el que permanecía estancada en los meses previos. Estas sorpresas positivas servían para revisar al alza las expectativas de subidas de tipos de interés por parte de la Reserva Federal y han llevado a otro cambio de precios en la rentabilidad exigida a la deuda pública de mayor duración. Los datos empujaron el rendimiento del bono del Tesoro de Estados Unidos a diez años al 1,93%, su nivel más alto desde finales de 2019. Mientras que la deuda alemana cotiza por encima del 0,2%, la española del 1% y la italiana del 1,75%. Por su parte, y a pesar de estas noticias, el euro se disparaba frente al dólar y vuelve a cotizar por encima del 1,145 tres meses después.

En Europa, los datos que conocíamos resultaban mixtos. Así mientras las ventas minoristas de la eurozona decepcionaban, los pedidos de fabrica alemanes se han recuperado fuertemente gracias a una mayor demanda interna, mientras que los pedidos extranjeros se han contraído aún más durante el mes. Como siempre en Europa, una de cal y otra de arena.

Los mercados de renta variable se mantuvieron volátiles y el comportamiento diario fue un reflejo del semanal. Los mercados norteamericanos registraron ganancias por segunda semana consecutiva. Además, no hubo apenas distinción semanal entre empresas de crecimiento y de valor, puesto que tuvieron un desempeño muy parecido, mientras que las compañías de mediana y pequeña capitalización superaron a las de gran capitalización. Fue una de las semanas más ajetreadas de la temporada de resultados del cuarto trimestre, con 112 compañías en el índice S&P 500 informando de sus cuentas. Estos incluyeron varios nombres de tecnológicas, que movieron de manera significativa los principales índices. Si el jueves el mercado se movió al son del informe de Meta Platforms que sufría una caída del 26% en el precio de sus acciones y veía cómo desaparecían un récord de 232.000 millones de dólares de su capitalización; el viernes, el informe de Amazon.com de ganancias mayores que lo esperado, impulsado en parte por su negocio de servicios web, ayudó a la recuperación de los índices.

Por su parte, los parqués europeos continuaron digiriendo el discurso del jueves de la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, quien parecía dejar la puerta abierta a un posible aumento de los tipos este año. Las bolsas de Centroeuropa volvían a hacerlo peor que las periféricas, Reino Unido incluido y terminaban la semana en números rojos.

Por su parte, Japón cerraba una gran semana, con el índice Nikkei 225 subiendo un 2,70%. La noticia de la emisora japonesa TBS de que el Gobierno se estaba planteando aliviar la prohibición de la entrada de extranjeros no residentes servía de revulsivo tras la falta de avances en la política monetaria. Por su parte, los mercados de China estuvieron cerrados durante la semana por el Año Nuevo Lunar.

Buena semana.