Los datos de PCE del viernes en Estados Unidos salieron en línea con lo estimado por el consenso de analistas y sin variaciones con respecto al mes anterior. La respuesta del mercado de deuda estadounidense fue positiva: la tir del treasury pasó de niveles cercanos al 4,57% a ceder por debajo del 4,50% en apenas unas horas. Movimiento similar experimentó el bono del mismo país con vencimiento en dos años, cerrando en niveles de 4,87%. En realidad, estas nuevas publicaciones no son tan positivas teniendo en cuenta la caída en los precios de la energía, lo cual indica que hay componentes que aún siguen presionando al alza.
No fue así para la deuda europea. En esta región, tuvimos la cifra de inflación preliminar del mes de mayo de la eurozona. Las cifras de evolución de los precios decepcionaron a los inversores, la lectura subyacente salió por encima de lo esperado, así como del dato previo. El resto de los países europeos reaccionaron de forma similar; entre ellos destaca Italia, que vio ampliada su prima de riesgo durante la jornada.
Tabla de datos de evolución de precios.
Estos números llegan en un momento de fuerte reajuste de las perspectivas sobre las actuaciones de los bancos centrales en los próximos meses. En Europa existe casi un consenso total del mercado sobre el recorte de 25 puntos básicos en la reunión del jueves. Donde existen más dudas es en el ritmo que seguirá a continuación, ya que datos como el del IPC del viernes no son alentadores. Por otro lado, bajar demasiado las tasas de referencia puede implicar una devaluación del euro y por consiguiente una importación de inflación sobre todo por el lado de los bienes energéticos. Al otro lado del Atlántico, las estimaciones que recoge Bloomberg dan actualmente una probabilidad del 59% a un primer recorte de tipos en la reunión de diciembre de este año. Los diferentes miembros de la Reserva Federal, que han ido haciendo declaraciones, han dejado claro que van a ser muy rigurosos con las próximas cifras de inflación y crecimiento a la hora de tomar decisiones. En este sentido, la hoja de ruta está aún abierta a diferentes escenarios.
Lejos, en China, conocimos los datos de PMI relativos al mes de mayo. Todos salieron por debajo de lo estimado y retrocedieron con respecto a los de abril. Llama especialmente la atención la cifra de PMI manufacturero, que vuelve a terreno de contracción (49,5) después del 50,4 previo. Esto reabre la posibilidad de nuevas medidas de estímulo por parte del gobierno de ese país, que sigue luchando por rescatar a un sector inmobiliario muy hundido que mantiene deprimida la confianza de los consumidores e inversores domésticos.
Con todos estos datos encima de la mesa, los índices de renta variable cerraron en su mayoría con números verdes, pero sin reflejar una convicción fuerte entre los inversores. En EE. UU. destacó el Dow Jones, liderado por la misma que le lastró el día anterior: Salesforce. La acción rebotó un 7,5% acompañada de un sentimiento bastante positivo por parte del resto del colectivo. Por lo demás, el S&P 500 cerró con un 0,8% y en Europa el Eurostoxx avanzó con un tímido 0,3%, el CAC un 0,18% y el Ibex a la baja con un 0,14%.
Por el lado macro, hoy tendremos batería de PMI, tanto de Estados Unidos como del agregado de la eurozona. Asimismo, los países miembros como Italia, España, Alemania o Francia publicarán los PMI manufactureros. Los compuestos y los de servicios los conoceremos el jueves 6. Ese mismo día, el BCE comunicará su decisión sobre los tipos de referencia, una noticia que marcará la semana y donde los mercados tendrán puesto el ojo los próximos días.
Feliz lunes.