Durante la semana pasada, una vez más, la inflación nos dio un aviso, con un dato de PCE en Estados Unidos más alto de lo esperado y una variación anual de un 5,4% frente al 5% estimado (la subyacente 4,7% frente a 4,3% esperado). Además, en la lectura del acta de la Fed se mostró unanimidad en la continuidad de subidas de tipos a partir de marzo. Esto generó incertidumbre entre los inversores haciendo que la volatilidad subiese, con aumentos de rentabilidad en las curvas de tipos y una evolución muy negativa en el segmento de renta variable.
Analizando más de cerca las curvas de deuda pública, en Europa, el bono alemán a diez años vio cómo su rentabilidad exigida aumentaba desde el 2,46% hasta el 2,53%. Recordemos que a principios de mes se encontraba en el nivel de 2,28%. Esto también arrastraba a las principales referencias europeas: en España escalaba hasta el 3,50% y en Inglaterra hasta el 3,72% (desde 3,47% al inicio de la semana). Por su parte, al otro lado del Atlántico, la deuda yanqui registraba caídas en precio en todos los tramos, con el treasury a diez años en el 3,93% y el dos años en el 4,81%, lo cual llevó la inversión de la curva hasta niveles de 88 puntos básicos. Las principales bolsas mundiales recogían el pesar del mercado en la semana. En EE. UU., el S&P 500 se dejaba un -1,46%, el Nasdaq tecnológico un -1,93% y el Dow Jones -1,77%. En el Viejo Continente los retrocesos fueron algo mayores, con el Eurostoxx 50 cayendo -2,2%, el DAX -1,7% y el Ibex que caía algo menos con -0,9%. Estos datos llevaron al VIX durante este periodo por encima de 23%, aunque cerró el viernes en el 21,60%, mostrando el nerviosismo del mercado.
El cruce entre el dólar y el euro no ha sido inmune durante estos días, en los que la moneda estadounidense se apreciaba una semana más, pasando del 1,068 dólares hasta el 1,054 dólares. El papel que juega este activo como refugio en momentos de incertidumbre del mercado es posiblemente lo que esté apreciando a esta divisa desde que tocase máximos de 2023 a finales de enero cruzando el nivel de 1,09 dólares.
En este entorno, las compañías continúan con la presentación de resultados. Hasta ahora han publicado el 90% en EE. UU. y el 60% en Europa, donde encontramos un 75% y un 70% de sorpresas de beneficios respectivamente. En el caso americano ese valor se sitúa en la media de los últimos años (75%), mientras que en el europeo se encuentra por encima de ese valor (55%). Para esta semana que entra, estaremos atentos a la presentación de resultados principalmente de compañías españolas como ACS, Red Eléctrica, Vicofan, Grifols, Aena, Cellnex y Acciona y en Europa lo harán Bayer, EDP o Veolia entre otras.
Por la parte macroeconómica, la agenda también estará apretada: se publicará el dato de confianza del consumidor de febrero tanto de la eurozona como de EE. UU., los PMI manufactureros y servicios de distintos países de la eurozona, EE. UU. y China y los PPI de enero de la zona euro.
Feliz lunes.