Buenos días.
Los inversores han optado por recuperar parte del terreno perdido en las últimas semanas, obviando los factores que más incertidumbre suman y decantándose por subirse al carro de las alzas. Con los acuerdos de Ginebra ya en el olvido, la tensión entre las “dos Ucranias” no para de crecer, y la escalada de presión que parecía haber arreciado, amenaza con desatarse en el este del país. Pero el mercado prefiere fijar el tiro en la micro: buenos resultados empresariales y cascada de operaciones corporativas en el sector farmacéutico para impulsar a los índices bursátiles.
A nivel macro ayer hubo pocas pero buenas referencias, tanto en EEUU como en Europa. Siguiendo el orden horario, la confianza de los consumidores europeos alcanza en abril el mejor nivel desde octubre de 2007, y eso que todavía sigue en -8,7 puntos, pero de nuevo apuntala un cambio de tendencia en el Viejo Continente. Mientras, en EEUU el sector de la construcción, que lleva meses alejado de los focos, mantiene el ritmo de la venta de vivienda existente a pesar de la escasez de oferta, al tiempo que el indicador regional de actividad de Richmond pasó de -7 a +7 en tan sólo un mes.
Ya de madrugada se ha publicado la lectura del PMI manufacturero chino elaborado por HSBC, el cual, aunque sigue en terreno contractivo (48,3 puntos para abril), cierto es que rompe una racha de medio año de caída ininterrumpida, cambio más que necesario para aplacar los miedos sobre el devenir de la economía del gigante asiático.
Para terminar por hoy lo haremos con España y el último informa de Moody’s. La agencia de calificación ha publicado una serie de conclusiones positivas sobre la situación financiera española, que sin embargo hacen énfasis en las debilidades, algo que en ciertas ocasiones el mercado puede tender a olvidar. Lo mejor, la buena marcha de la exportaciones (y el consiguiente cambio de modelo productivo) y sobre todo, el más que posible repunte de la demanda interna en el futuro inmediato; lo peor, déficit y deuda, y su impacto en la recuperación de la economía. Entretanto, el Tesoro se sometió a la demanda de los mercados de nuevo con nota en emisiones a tres y nueve meses.
Buen día.
Amílcar Barrios Vilallonga
Dirección de Inversiones