Sin referencias macroeconómicas relevantes, llevamos unas cuantas sesiones donde los principales índices mundiales se mueven en rangos estrechos de cotización. Llámese Eurostoxx 50, coqueteando durante muchos días con el 4400, o S&P 500, cerca también de los máximos del año (4200). El caso es que da la sensación de que para superar los respectivos máximos bursátiles vamos a necesitar un buen catalizador. Como decía, la renta variable no tuvo casi cambios respecto al martes, mientras el bono a diez años estadounidense se situaba por encima del 3,60% y el alemán volvía a la zona del 2,50%. El euro, a su vez, se mantenía estable frente al dólar, 1,095, después de varios días de caídas.
Hace tiempo que no hablamos de inflación, o al menos no tanto como lo hacíamos hace meses. Pero los consumidores norteamericanos están teniendo que utilizar cada vez más créditos para pagar artículos cotidianos, poniendo de manifiesto el impacto financiero que está teniendo el incremento en el coste de la vida. El precio medio de los alimentos, por ejemplo, lleva una subida del 8,4% en lo que va de año. Casi la mitad de los estadounidenses está usando aplicaciones de «compre ahora, pague después» y, de estos, uno de cada cinco confía en estas para comprar comida, según una encuesta de LendingTree. Alrededor del 27% de los usuarios usan estos préstamos entre nómina y nómina. Desde luego no es la situación más idílica para la economía estadounidense.
Valor total de los nuevos préstamos originados por Affirm, Afterpay, Klarna, PayPal y Zip.
Fuente: Consumer Financial Protection Bureau.
La semana pasada comenzó de forma oficiosa la temporada de resultados en EE.UU. y se espera que el 87% de las empresas del S&P 500 se examinen ante los inversores en las próximas tres semanas. Las estimaciones para el trimestre se sitúan en una caída interanual que estará en el entorno del -5%, tanto en ventas como en beneficio por acción. De momento estamos viendo bastante volatilidad tras las presentaciones, un buen ejemplo es Netflix. La compañía de entretenimiento sufrió durante la sesión de ayer, después de mostrar una caída del 18% en sus beneficios y decepcionar con el dato de nuevas suscripciones. La competencia en el sector se ha ido incrementando con el paso de los años: Netflix, YouTube, Amazon Prime, Disney+, Apple Tv, SkyShowtime, Hulu y un largo etcétera luchan por nuestra atención. Pero claro, sin pandemia este tipo de entretenimiento también compite con la vida social, los viajes y el ocio en general. Veremos cómo acaba repartiéndose esta tarta. También conocimos los resultados de ASML, la compañía que fabrica las máquinas que producen los circuitos integrados (fotolitografía), que logró batir todas las estimaciones del mercado, salvo la parte de nuevas reservas. Parece que algunos de los grandes jugadores de la industria de semiconductores (Taiwan Semiconductor, Samsung, Micron, etc.) están posponiendo sus decisiones de inversión. Aun así, la demanda de los sistemas avanzados de ASML sigue superando con creces la oferta, por eso la cartera actual de pedidos equivale a los ingresos de un año y medio. Ahí es nada.
Hoy conoceremos los datos del índice de precios del productor (IPP) en Alemania, la balanza comercial de España y nuevas peticiones de subsidio por desempleo en EE.UU., un buen termómetro para ver cómo está el mercado laboral norteamericano. En el plano empresarial, el jueves publican resultados Taiwan Semiconductor, Philip Morris, AT&T, American Express, Blackstone, EssilorLuxottica, Heineken y Pernod Ricard, entre otras.
Por último y para los más nostálgicos: Netflix también anunció que a finales de año cerrará su servicio de alquiler y distribución postal de series y películas en DVD. Algo más testimonial que otra cosa ―dado que «apenas» generaba algo más de 130 millones de euros al año (el 0,5% sobre el total)―, pero que seguro que tras leerlo a más de uno le ha traído recuerdos de un pasado no tan lejano. Y hablando del pasado, ayer Telefónica cumplió 99 años. Historia «viva» de nuestro país.
Feliz jueves.