Buenos días.
Menos mal que las autoridades chinas fueron capaces de capear el temporal sobre su divisa durante el día de ayer y mantenerla estable, porque otro episodio del viaje sin fin del petróleo fue por sí solo capaz de tumbar unos mercados que apuntaban a rebote. La publicación de los inventarios de gasolina en EEUU fue la mecha que prendió las ventas de unos inversores que ni saben ni entienden cuál es el futuro del sector, en 30, 20, 10 o 50 dólares por barril a corto/medio plazo. Aunque aquí en España, eso de no saber hacia donde vamos nos es muy familiar después de la constitución del Congreso.
Precisamente la evolución del precio del petróleo es uno de los puntos negros de la primera economía mundial según el Libro Beige de la Fed por la inmensa industria energética allí presente. Aunque no es el único, pues también el dólar suma en negativo. Choca que estos sean justo dos de los factores que generan para muchos de Europa la esperanza bursátil del año. De vuelta a la publicación del Libro, el mensaje no se altera en cuanto a definiciones, pues el crecimiento sigue siendo modesto y la inflación moderada, es decir, más de lo mismo.
Tampoco hay novedades de calado en cuanto al estado del sector secundario internacional. En Europa, la producción industrial cedió siete décimas en noviembre, más del doble de lo previsto, mientras que el fuerte descenso de los pedidos de maquinaria en Japón coincidió en el tiempo con otra advertencia de Kuroda (gobernador del Banco de Japón) de tomar más medidas de ser necesario.
Buen día
Amílcar Barrios Vilallonga
Dirección de Inversiones