Esta semana ha sido clave, tanto para Estados Unidos como para el resto del mundo, marcada por eventos de gran relevancia, entre los que destacan los resultados de las elecciones presidenciales y la publicación del PMI de servicios. Ayer conocimos las solicitudes de subsidio por desempleo y, finalmente, la esperada reunión del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC), sobre la política de tipos de interés.
La primera señal positiva vino con el aumento de las solicitudes de subsidio por desempleo, que se situaron en 221.000, un incremento leve frente a las 218.000 de la semana anterior. Este dato apunta a una posible estabilización en el mercado laboral y se interpreta como un paso hacia el objetivo de «aterrizaje suave» de la economía, que busca moderar el crecimiento sin provocar una recesión. Además, el dato fue inferior a las expectativas reforzando la perspectiva de una economía en transición controlada.
Sin embargo, el foco principal estuvo en la reunión del FOMC, donde se ha confirmado por unanimidad una bajada de 25 puntos básicos en los tipos de interés, situándolos en un rango de 4,50% – 4,75%. Este ajuste, el segundo recorte en el ciclo actual, establece los tipos en su nivel más bajo desde febrero de 2023. Los temas clave de la reunión incluyeron la moderación del crecimiento en el empleo, el sólido ritmo de expansión económica y el progreso hacia el objetivo inflacionario del 2%. Con la próxima reunión en diciembre, el FOMC ha decidido no fijar un rumbo específico, manteniendo flexibilidad para ajustar su política según evolucione la economía. Esta bajada de tipos reduce el coste de endeudamiento para empresas y consumidores, lo que debería apoyar a la economía.
En cuanto al mercado bursátil, el Nasdaq ha liderado las ganancias con un alza del 1,51%, seguido por el S&P 500 con un avance del 0,74%, mientras que el Russell 2000 retrocedió un 0,34% tras la importante subida del miércoles. Dentro del índice S&P 500 han destacado especialmente los sectores de servicios de comunicación, tecnología y consumo discrecional. Respecto a los índices europeos, también se ha observado un comportamiento positivo: el DAX subió un 1,70%, el CAC 40 un 0,76%, el Ibex 35 un 0,65%, mientras que el FTSE 100 retrocedió un 0,32%. Por el lado de la renta fija, el bono a diez años americano se situó en el 4,33% y el dos años en el 4,19%. El diez años alemán se situó con una rentabilidad del 2,445% y el dos años con un 2,21%.
En el ámbito macroeconómico europeo, la noticia más relevante provino del Reino Unido, donde el Banco de Inglaterra ha decidido reducir los tipos de interés en 0,25%, motivado por la moderación de la inflación en la región. También se ha mencionado la posibilidad de nuevos ajustes graduales, si la tendencia de desaceleración inflacionaria persiste.
En Alemania, la balanza comercial fue inferior a lo esperado, situándose en 17.000 millones de euros frente a los 21.000 millones previstos, lo cual indica una leve disminución en el superávit comercial del país. El dato positivo llegó con las ventas minoristas de septiembre en la zona euro, que superaron las expectativas, alcanzando un crecimiento mensual del 0,5% frente al 0,4% previsto. Este incremento en el consumo sugiere que los consumidores europeos mantienen cierto nivel de gasto, lo cual es una señal alentadora.
Hoy conoceremos en Estados Unidos, por parte de la Universidad de Michigan, las expectativas de inflación, así como las de consumo. En Europa, la atención está centrada en la cumbre de líderes de la Unión Europea.
Feliz viernes.
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