Roma busca dirigente político y espiritual

Buenos días.

Roma busca dirigente político y espiritual. Y mientras la prensa mundial dirige sus miradas a la ciudad eterna, los inversores hacemos lo propio hacia al mercado de bonos para ver, minuto a minuto, punto básico a punto básico, la prima de riesgo italiana. Así que esta mañana abro Bloomberg —para comprobar cierta relajación del tipo de interés del bono italiano (y por simpatía del español)— que hoy saluda con la siguiente frase: «La razón y el juicio son las cualidades de un líder», por Publius Cornelius Tacitus, historiador, senador, cónsul y gobernador del Imperio romano.

Ayer el mercado recuperó parte de lo perdido el día anterior, no sé si esperando que el desgobierno italiano apele a la razón y al juicio para evitar dañar tanto a su propia economía como la del conjunto del euro; no sé si como muestra de confianza en el poder dialéctico que está demostrando Mario Draghi: el presidente del BCE prometió que la institución preservará la integridad de la unión monetaria por el bien de los ciudadanos de los países que la integran.

La subasta de bonos italianos dio un respiro a la deuda periférica, puesto que se emitió lo máximo establecido, aunque a unos costes mayores, lo que permitió cierta relajación de las primas de riesgo en Italia y España. Una España que arroja un déficit público del 6,7% en 2012, y aunque 3 décimas por encima de lo pactado con Bruselas, la cifra es inferior a lo estimado por la Comisión Europea. Aunque aquí, señores, nos estamos haciendo trampas al solitario pues la cifra no incluye las ayudas a la banca —por las que también pagamos intereses—, que elevarían el déficit al 10,2%.

Más lejos, en EE.UU., donde muchos inversores confiesan no entender a Europa en general, y a Italia en particular, prefieren mirarse el ombligo ante unos datos de mercado inmobiliario que siguen evidenciando la recuperación del sector. Pero mirarlo de soslayo porque el acuerdo entre sus políticos sobre los ajustes fiscales que han de venir está en un punto muerto.

Menos mal que queda Ben Bernanke, quien ayer volvió a defender la flexibilización de la política monetaria que la Fed lleva aplicando en los últimos años.

Buen día,

Montserrat Formoso Fraga
Directora de Gestión