Buenos días.
Las primeras semanas de mes tienen estas cosas, que la cautela se apodera de los inversores a la espera de ver qué camino toma el Consejo de Gobierno del BCE, así como para comprobar si la recuperación del mercado laboral norteamericano es capaz de mantenerse por encima del umbral de los 200.000 nuevos puestos de trabajo, los que se dicen necesarios para que la economía de EEUU muestre los signos de fortaleza que dejen de hacer necesarios los estímulos de la Fed. Ya que mencionamos a la Fed, la reciente espiral positiva de los indicadores del país está volviendo a ejercer de palanca de presión contra la vigencia del QE3, de ahí que, por raro que parezca y sea, la buena marcha de la actividad real no sea del todo bien recibida.
Con los mercados obviando situaciones como las de Ucrania o Tailandia, el rally de Navidad sigue en la mente de todos. Para ello pocas cosas pueden ser tan necesarias como las ventas minoristas desde Acción de Gracias; éstas han crecido un 1% en términos interanuales, mostrando que la menor afluencia a las tiendas ha sido compensada con el incremento del comercio por internet en el Cyber Monday. El contrapunto llegado de aquella orilla atlántica nos lleva a la suspensión de pagos de Detroit, ya aceptada por la justicia, pero el miedo no son tanto los USD 20.000 MM de deuda que habrá que restructurar, sino el impacto que esto tendrá sobre los títulos municipales del país, si todo sea dicho, lo tiene.
La batería de datos macro del día de ayer no venía especialmente cargada, pero deja algunas pinceladas dignas de comentar. España, por primera vez en demasiados años, volvió a crear empleo en un mes de noviembre, lo que nos devuelve a la tendencia de creación que quedó interrumpida durante los dos meses anteriores. Brasil, estrella emergente hasta hace no mucho, no encuentra el camino de la salvación: ayer se publicó una nueva caída de medio punto del PIB, dos décimas más de lo previsto, y que se suma a las urgencias del banco central por atajar la inflación con una reciente subida de tipos.
Hoy, para terminar con una curiosidad, mencionar que China se encuentra en pleno éxtasis patriótico después de que el yuan haya conseguido arrebatar al euro la plata como divisa en el comercio internacional, por lo que ya se vislumbra en el horizonte una batalla entre las dos potencias hegemónicas del futuro cercano.
Buen día.
Amílcar Barrios Vilallonga
Dirección de Inversiones
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