EEUU: Los indicadores publicados ayer fueron positivos

Buenos días.

En jornadas como las de ayer, en las que prima (parcialmente) la economía sobre la política, los inversores acuden hacia los activos de mayor riesgo, tal y como refleja la rotura de máximos históricos de algunos de los índices bursátiles como son el S&P 500 o el DAX, o multianuales como el Ibex y el CAC 40. Y todo ello a pesar del recrudecimiento de los enfrentamientos en el este de Ucrania o de la tensa espera para conocer si el BCE decide actuar o no.

Lo mejor de la jornada vino de EEUU, país que se empeña en mostrar el camino de la recuperación económica con el QE3 en marcha y fecha de caducidad. Los indicadores publicados ayer fueron positivos en términos generales: los pedidos de bienes duraderos no sólo no retrocedieron como esperaba el consenso, sino que, en gran parte gracias al gasto militar, crecieron un 0,8% en abril; el precio de la vivienda de veinte de las principales ciudades del país, medido por el Case-Shiller, asciende otro 1,2%, mostrando el buen tono del sector; la confianza de los consumidores elaborada por The Conference Board cumple con las expectativas que apuntaban a un aumento; las únicas referencias relativamente negativas vinieron de los regionales de actividad, dado que, tanto en Richmond como en Dallas, los índices manufactureros no fueron capaces de alcanzar las expectativas.

Por su parte en Europa ya han empezado a afilarse los cuchillos de la política comunitaria. Tras el resultado de las elecciones, el nombramiento de Juncker al frente de la Comisión parecía ser tranquilo, pero la necesidad de pactar con socialdemócratas, la acusación de excesivo europeísmo del luxemburgués por parte de David Cameron, o la sorprendente desidia de Merkel para apoyarlo, dejan en el aire la nueva ocupación del expresidente del Eurogrupo, que sin embargo, sí podría tener el voto de Francia. Siguiendo en Europa pero cambiando a la política monetaria, Ewald Nowotny, representante austríaco en el BCE, reconfirmó ayer la preocupación del banco por la baja inflación, lo que podrá o no interpretarse como un mensaje de cara al próximo jueves.

El postre de hoy lo reservamos a España, capaz en el primer trimestre del año de reducir el déficit público un 18% respecto al mismo periodo de 2013. A pesar de la gran importancia de este dato, la atención fue para la última aportación del FMI para la economía española. En ésta, a grandes rasgos el organismo apuesta por realizar quitas de deuda de Hacienda (somos todos) a empresas viables, nuevas subidas del IVA a las que el Gobierno, ciudadanos y empresas sistemáticamente se vienen negando para reducir deuda y déficit, o eliminar exenciones en el IRPF, pero eso sí, acompañado todo ello de un reconfortante reconocimiento a las reformas y la mejora económica.

Buen día.

Amílcar Barrios Vilallonga
Dirección de Inversiones