BLOG
20/07/2017 AUTOR: Gonzalo Ramírez Celaya Análisis & Inversiones

Biodramina para los tipos de interés

Biodramina para los tipos de interés

Consolidación, lateralidad, búsqueda de catalizadores… Hemos dejado atrás el fuerte movimiento al alza del primer semestre y ahora estamos sin saber si es el momento de seguir apostando por el mercado, y en especial por la renta variable, o esperar a que caiga para entrar a niveles más baratos.

Es posible que suceda esa esperada caída, o no, pero en ambos casos seguimos pensando que la bolsa tiene recorrido.
Y esta confianza se resume en lo que estamos viendo: políticas laxas, datos macro positivos, datos empresariales que mejoran las expectativas, inflación moderada… ¿Cuándo hemos visto un escenario tan positivo para invertir en estos últimos años? Parece que nos da vértigo lo rápido y alto que hemos subido pero si miramos hacia arriba todavía falta recorrido hasta llegar a los 4500 del Eurostoxx.

Y no olvidemos la ausencia que actualmente tenemos de los problemas políticos que vivimos en Europa en el segundo trimestre. La llegada del europeísta Emmanuel Macron, y su sintonía con Angela Merkel, acompañado de la cada vez más antipatía de los ingleses por el brexit, hace que la apuesta por Europa se afiance. Y así lo refleja el tipo de cambio  —aunque me da la impresión que no es tanto el mérito del euro como la depreciación del dólar— rompiendo el pasado martes los niveles de 1,1580.

Y España sigue siendo el líder y ganador de Europa como si fuera la Roja del año del albaceteño. El PIB (producto interior bruto) esperado para este año es de un 3,2% cuando la media de la eurozona es de 1,9%, y Estados Unidos 2,1% , con un paro que desciende del 23% del 2014 a 18,6%  y un 13,5% esperado para el 2019, y un diferencial con Alemania que baja de los 100 p.b. Les recuerdo que hace exactamente un año , Italia y España se financiaban a diez años al mismo nivel : 1,21% . A día de hoy España a 1,55% e Italia a 2,19%.

Estados Unidos es otro cantar. A principios de año la inflación estaba a 2,4%. Tenía sentido cuando se esperaba el famoso reflation trade de Trump basado en sus programas fiscales y de infraestructuras. En abril el IPC (índice de precios de consumo) fue 2,2%, 1,9 en mayo y 1,6 en el mes de junio… Esto es debido a unos datos macro que empiezan a ser peores de lo esperado, con un precio de la energía que sigue presionando a la baja y con unos salarios que no suben aunque los datos del paro invitan a pensar que deberían estar haciéndolo de una forma robusta. No hay que poner en duda el crecimiento de la economía americana pero será mucho más suave de lo esperado . Por ahora el presidente americano no ha conseguido ni un quesito. Por cierto, el martes pasado de nuevo fracasó la propuesta de reforma sanitaria y la derogación del ObamaCare por la negativa de cuatro senadores de su propio partido lo que hizo imposible llegar a los cincuenta senadores para su aprobación.

Y antes de irnos de vacaciones no debemos olvidar los países emergentes y en especial China, que nos sorprende con un crecimiento del 6,9% originado en mayor medida por el sector servicios. Por fin empezamos a ver un cambio en el crecimiento, aunque no debemos taparnos los ojos ya que la deuda privada sigue siendo preocupante.

Por todo esto debemos seguir esperando que las bolsas se mantengan, siempre y cuando los resultados empresariales que se están ya presentando nos muestren unos beneficios por acción robustos y muchos más fuertes que los del primer trimestre (las caídas que estamos viendo en las bolsas desde los máximos de mayo no reflejan aumento de volatilidad, lo que nos confirma que el mercado está muy sostenido).

Y como si la renta variable no tuviera nada que ver con los tipos de interés, ni estos últimos con las bolsas, las rentabilidades de los bonos no paran de moverse como una peonza, sin que el mercado tenga una idea clara de dónde se dirigen. Biodramina para los tipos.

Al cierre del martes, el bono americano se encuentra al 2,26%. El pasado 26 de junio la rentabilidad era del 2,13%, sin embargo la comparecencia de Janet Yellen indicando que la baja inflación sería pasajera nos llevó a una rentabilidad de 2,38% y ahora de nuevo a un punto intermedio.
Algo muy similar en Europa, exceptuando Alemania. Antes de hablar Mario Draghi en Sintra indicando que el BCE  estaba en disposición de revisar su política monetaria, el bono a diez años español estaba a 1,37% subiendo hasta 1,73%, y ahora nos encontramos a 1,55%.
Alemania del mínimo de 0,25 ha subido hasta 0,60%, y ahora se encuentra en 0,55%.

La primera conclusión que debemos sacar es que no hay claridad en las políticas monetarias. La segunda es más importante a mi modo de ver y nos dice que el crecimiento futuro va a ser más que moderado. ¿Y estos comentarios de Mario Draghi han afectado al corto plazo? Nada de nada. Los tipos siguen siendo negativos o cerca de cero. Y en este caso la única conclusión que debemos sacar es que… vivan los tipos fijos y el carry!

En conclusión, bolsas que esperamos que se asienten en los datos empresariales para seguir avanzando, con unas inflaciones tan bajas y el miedo por parte del BCE a que la subida de tipos sea más pronto de lo necesario y afecte a los déficits soberanos; bonos a tipo fijo que han demostrado que son una buena apuesta (les recuerdo que la curva de los futuros del euribor no descuentan tipos positivos hasta junio 2019). Y no se olviden de los financieros. Si suben los tipos, busquen bonos flotantes financieros a largo plazo que siguen siendo caballos ganadores.
Pocas veces hemos visto que tanto el mercado de renta variable como el de renta fija se comporten tan bien, consiguiendo rentabilidades tan positivas con un Eurostoxx por encima del 5,80%, el índice de renta fija high yield de Barclays (BEUH Index) en el 3,74% y el de high yield en Estados Unidos (BUHY Index) en 5,74%.

Disfrútenlo.

Gonzalo Ramírez Celaya
Director de Renta Fija y Estructurado

Contenido relacionado

¿Tienes alguna pregunta?

Si tienes alguna duda puedes ir a nuestra sección de preguntas frecuentes.
 
También puedes:
 
● llamarnos al 900 827 770 o 917 020 274
● enviarnos un mail a tressis@tressis.com